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Historia

La historia del Soundpainting

En el otoño de 1974, después de asistir por unos años a la Berklee College of Music, Walter Thompson se mudó a la casa de verano de su familia en Woodstock, Nueva York. Solicitó y recibió una beca de la Fundación Nacional de las Artes para estudiar composición con instrumentos de viento, con Anthony Braxton. Durante este período, también estudió danza con Ruth Ingalls.

Woodstock, durante la década de 1970, era una ciudad importante para el crecimiento de la música creativa. Esto se debió principalmente a la Escuela de Música Creativa (CMS), fundada por Karl Berger, que solía invitar a compositores y artistas como John Cage, Ed Blackwell, Carlos Santana, Don Cherry, Anthony Braxton, y Carla Bley, entre otros; dichos artistas impartían clases magistrales a los estudiantes, a lo largo de dos semanas, y con frecuencia cada seminario culminaba con actuaciones en vivo.

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En los años anteriores el CMS solía cerrar durante el verano, y muchos de los estudiantes se quedaban a vivir en Woodstock hasta que la escuela retomaba sus actividades curriculares. Durante el primer verano, Thompson organizó sesiones de improvisación con estos alumnos y formó su primera orquesta. Su grupo incluyó 22 músicos y 7 bailarines. Los bailarines improvisaban en base al material desarrollado por los músicos. Thompson realizó una serie de 3 conciertos con su orquesta en Kleinert / James Gallery de Woodstock. El trabajo de enfocaría en la interpretación de composiciones que incorporaban secciones de improvisación con forma abierta. Fue durante estos primeros días que Thompson creó sus primeras señas que posteriormente llegarían a convertirse en la lengua del Soundpainting.

Los primeros gestos del Soundpainting fueron creados en tiempo real durante el concierto de apertura. Thompson había escrito una composición en la cual la regla básica para cada intérprete al improvisar como solista, era tener una relación con el material escrito. La primera persona en tomar ese rol, no siguió la regla y Thompson consideró que a fin de mantener la integridad de la pieza, necesitaba encontrar una manera de guiar a la composición en función del solista. Decidió crear una seña para que los demás intérpretes toquen un contenido específico detrás del solista. En el momento, creó el gesto de Nota Larga (Long Tone) señalando a varios intérpretes, y realizó otro gesto para que comiencen. La Nota Larga fue fácilmente comprendida y ejecutada por los artistas, y unos minutos más tarde Thompson creó el gesto de Puntillismo, que también resultó fácil de entender y de realizar. Después del concierto Thompson continuó desarrollando sus señas y en los próximos años llegó a crear 40 nuevos gestos.

En 1980 se trasladó a Nueva York y formó la “Walter Thompson Orchestra” (entonces conocida como “The Walter Thompson Big Band”). Durante el primer año con dicho grupo, mientras interpretaban una de sus obras escritas en un concierto en Brooklyn, Nueva York, Thompson trató de comunicarse con su orquesta y decidido utilizar algunas de sus señas. La segunda trompeta estaba tocando un solo, y durante ese tramo Thompson pidió a uno de los otros trompetistas que cree un fondo repetitivo acompañando al solista, e indicó la frase: Trompeta 1 – Fondo – Con – 2 Compases – Feel; Míreme, y luego marcó un compás de cuatro tiempos para que entrara a tocar, pero la primera trompeta no respondió, y miró al director con estupor. Thompson nunca había usado los gestos con su nueva orquesta, y ellos no tenían ni idea de lo que significaban. Una semana más tarde, en el ensayo, varios miembros de la orquesta le preguntaron qué significaba esa seña, y Thompson enseñó algunos gestos a los miembros de la orquesta, que respondieron con entusiasmo, cosa que alentó a Thompson a continuar desarrollando el lenguaje. Durante los siguientes 10 años, desarrolló el Soundpainting hasta convertirlo en un lenguaje integral de más de 200 señas, para la composición de música en tiempo real. En 1990, Thompson comenzó a extender el lenguaje con el propósito de incorporar actores, bailarines y artistas visuales.

En palabras de Thompson:

“Mi primera oportunidad de realizar Soundpainting con actores llegó en 1990. Estaba viviendo en Nueva York y recibí una petición del Lincoln Center. El organizador del “Lincoln Center Out of Doors” me encargó la composición de una obra que incluyera la participación de la audiencia. En ese momento mi orquesta estaba constituida únicamente por músicos. Con el fin de cumplir con los requisitos del trabajo, decidí incluir dos actores del “Irondale Ensemble Theatre” (en aquel entonces yo era su director musical). Enseñé Soundpainting a los actores Leese Walker y Josh Taylor  y los agregué a la orquesta. Su papel en la pieza era responder a los gestos que incorporaran el uso de la voz, palabras y movimientos físicos. Durante el desempeño de los actores, por defecto, se dirigirían a la audiencia cuando se les indicara una seña. El público recibió muy bien la propuesta, y a veces les respondían a los actores hablando. Me gustó la idea de utilizar algo de lo que el público estaba diciendo y lo incorpore en la composición. Este ida y vuelta con el público constituyó el material básico que trabajé a lo largo de toda la composición. La experiencia de Soundpainting con músicos y actores juntos fue emocionante, desafiante y presentó un nuevo territorio a explorar; se abrió hacia mí un nuevo mundo para la composición. A partir de ese momento, cuento con actores como miembros permanentes en mi orquesta.”

“Fue unos años después que tuve la oportunidad de desarrollar Soundpainting para bailarines. La coreógrafa Margery Segal, quien en ese momento tenía una compañía de danza con sede en Austin, Texas, me encargo la composición de una pieza para 100 bailarinas y una orquesta de 35 músicos, con Soundpainting. Para preparar a los bailarines, antes de nuestro primer ensayo con todo el grupo, trabajé con Margery durante dos semanas aclarando y codificando lo que cada gesto significaba para los bailarines. Algunos gestos eran fáciles de traducir al movimiento, mientras que otros no. Por ejemplo, nos llevó más de dos semanas codificar lo que significaba un tono largo para los bailarines.

 

La pieza se realizaría al aire libre, en el puente de la Congress Avenue, en Austin, de 16 a 17 hs. Los bailarines iban vestidos de blanco y los Músicos de blanco y negro. Una parte importante de la obra, aunque difícil de ensayar, fue la incorporación de más de 2 millones de murciélagos. Cada día, alrededor de las 16:45 hs, los murciélagos, que vivían en los pilotes del puente, volaban a la caza de alimentos (cuando sucedió, el ​​cielo se volvió negro). Así que tuve que calcular que la pieza de 1 hora de duración culminara junto al frenesí de la alimentación crepuscular de los murciélagos. Afortunadamente, todo salió bien, los bailarines y músicos estuvieron magníficos y los murciélagos salieron de la forma en que yo esperaba. Me quedé muy contento con  la totalidad de la pieza.

Después de mi trabajo con Margery fui a Nueva York y trabajé con el coreógrafo Gus Solomon para fomentar el desarrollo del Soundpainting con bailarines. Añadí a Gus y otros dos bailarines a mi orquesta, creando mi primer grupo multidisciplinario, con músicos, actores y bailarines.”

 


El Soundpainting en Europa

A finales de 1990 Thompson fue invitado por Dave Liebman y Ed Sareth para dar un taller de Soundpainting en la Asociación Internacional de Escuelas de Jazz (IASJ), celebrada en Santiago de Compostela. Esta fue la primera vez que Thompson dio un taller de Soundpainting en Europa. Después de la conferencia, hubo muchas invitaciones para realizar y enseñar Soundpainting. La invitación más importante fue la de François Jeanneau para dar un taller de una semana de duración en el Conservatorio de París. Después de la residencia de Thompson en el Conservatorio, Francois se dedicó a aprender el idioma y no tardó en componer con él, dar clases magistrales y efectuar conciertos. Hoy François Jeanneau es una fuerza impulsora, que enseña y da conciertos de Soundpainting por todo el mundo.

La aceptación y el uso de la lengua del Soundpainting en Europa han crecido rápidamente desde el primer taller de Thompson en España. Además de Thompson y Jeanneau, hoy en día hay muchos Soundpainters muy fluidos en Europa y Estados Unidos, que se desempeñan activamente en la enseñanza de la lengua. Algunos de ellos son: Vincent Le Quang, Sabine Vogel, Evan Mazunik, Jennifer Rahfeldt,  Sonja Korkman, Christophe Mangou , JeffreyAgrell , Angelique Cormier , Gustav Rasmussen, Ketil Duckert, SylvainMazens, Etienne Rolin, Gil Selinger, SarahWeaver, Todd Reynolds, Rafaele Arditti, y muchos más.

Hoy en día el Soundpainting también se utiliza en el ámbito profesional, institucional, empresarial y en la educación, en muchos países alrededor del mundo.

Una lengua viva

El Soundpainting es una lengua viva y en crecimiento, que actualmente cuenta con más de 1200 gestos. Los idiomas hablados están cambiando y creciendo todo el tiempo. Ya sea por necesidad o por el paso del tiempo, los seres humanos y las sociedades intrínsecamente crean nuevos conceptos y modifican los antiguos para adaptarse a los tiempos actuales. Se crean nuevas palabras, otras más viejas pasan de moda, las abreviaturas y el argot se desarrollan, etc. El Soundpainting comparte este mismo patrón de crecimiento. Con el fin de atender las necesidades de ese crecimiento y prevenir que el idioma se expanda en cientos de dialectos diferentes, cada año Sounpainters experimentados se reúnen para desarrollar el lenguaje en el evento conocido como “Soundpainting Think Tank”. Cada grupo de reflexión consiste en una conferencia anual donde se invita a Soundpainters de todo el mundo para reunirse, compartir ideas y ayudar a desarrollar el lenguaje en todas sus disciplinas. Hasta la fecha (2014) se han registrado 17 Think Tanks.

 

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